- Esconde los círculos de diferentes colores dentro del salón o área abierta; invita a los niños a buscarlos. Al final, tendrán que leer lo que encontraron y decir si la palabra, actitud o acción que encontraron ayuda o no a vivir el respeto.
- Hagan mezclas utilizando un círculo de cada color, de manera que en cada una tengan una actitud, una palabra y una acción, por ejemplo: decir "por favor" pero "empujando" o "saludar" pero burlándose". Representen diferentes acciones, palabras y actitudes; observen qué es necesario cuidar en ellas para mostrar respeto.
- Lean cada una de las opciones de los círculos y coloquen dentro de la lámina de la imagen de los tres contendores, aquellas que ayudan a vivir el respeto. Dejen fuera las que son obstáculos. Sigan la guía de color.
- Al azar, saquen uno de los círculos. El profesor o un voluntario lo leen en voz alta, el resto del grupo tendrá que representar, con mímica, cómo se sentiría al recibir esa palabra, acción o actitud.
- Coloca dos letreros en el piso, uno que diga “RESPETO” y el otro “FALTAS DE RESPETO”. Lean las opciones de los círculos y los niños tendrán que correr a colocarse alrededor de la palabra que corresponda, según si el comportamiento es respetuoso o no lo es.
- Dejen en una botella o bolsa los círculos que ayudan a vivir el respeto; al azar pueden ir sacando uno cada día, y proponerse vivir eso con especial intención ese día.